

Tras el fallecimiento de Huguito Flores, Karina y Rubén Enríquez –como consecuencia del impactante accidente en la Ruta Nacional 34 a la altura de Garza– los cuerpos del artista y sus familiares fueron trasladados a la morgue judicial para ser examinados por el médico forense.
Respecto al cuerpo de «Huguito», los médicos señalaron que se encontraba con «traumatismo cerrado en el área del tórax y el abdomen, con fractura de todas las costillas del lado izquierdo, ruptura del riñón izquierdo, laceración del hígado y fractura en la cadera izquierda».


Por otro lado, su esposa Karina sufrió «una lesión cortante en la base del cráneo de 8 por 4 centímetros, fracturas en las vértebras atlas y axis, un traumatismo cerrado en el tórax con fractura de costillas en el lado izquierdo, fractura de clavícula y en la articulación del hombro izquierdo».
Finalmente la autopsia realizada al cuerpo de Rubén indicó que tenía «una lesión contuso-cortante de 20 centímetros por 7 que afecta profundamente el músculo del cuello y el paquete vasculonervioso del cuello, así como una fractura en la columna cervical y un traumatismo cerrado en el tórax, con fractura de costillas en el lado derecho».