El Gobierno volvió a cuestionar la marcha y paro nacional de docentes, no docentes, autoridades, investigadores y estudiantes universitarios convocada para el martes 23 de abril. «Está incentivada por la política», aseguró el vocero presidencial, Manuel Adorni, y sostuvo que «el reclamo de los alumnos es genuino, lo que no consideramos genuino es que desde un escritorio incentiven a este tipo de cuestiones».
La movilización fue convocada de manera conjunta por el Frente Sindical de Universidades Nacionales, que nuclea a los gremios docentes y no docentes Conadu, Conadu Histórica, Fedun, Fagdut, UDA, Ctera y Fatun; la Federación Universitaria Argentina (FUA), que representa a más de dos millones de estudiantes en el país; y el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), organismo no estatal que congrega a las autoridades de 57 universidades nacionales y 14 provinciales, entre otras instituciones.
El reclamo es en contra del desfinanciamiento que lleva adelante el Gobierno a cargo de Javier Milei, que mantiene el presupuesto de 2023 en medio de una inflación interanual de más de 200%.
«El jueves hubo diálogo y un acuerdo. El Gobierno aumentó el 70% las partidas de gasto en marzo, habrá otro 70% en mayo y se dispuso una partida extraordinaria para hospitales universitarios«, expresó Adorni en su habitual conferencia de prensa. Sin embargo, desde las universidades negaron que existiera esa asignación de fondos.